28.9.09

Autopsicoanálisis, de lo que pasó.

Hace más de 3 años, (3 años y 9 meses para ser exacta) mis papás se separaron. Pocos entienden lo traumático de la situación. Otras veces antes ya había pasado, pero siempre volvían a estar juntos, así que no había de qué preocuparse. Pero algo hizo que esa vez fuera distinta. Después de 2 meses mi papá nos llevó con mi hermana de vacaciones; y ahi nos dijo, que él no podía estar toda la vida solo, por eso estaba saliendo con alguien. Me quedé congelada y lo odié en silencio, mientras me contaba de lo linda y divertida que era; y que cuánto antes me la quería presentar. ¡Nada más habían pasado 2 meses!. A alguien tenía que contarle que mi mundo se me venía abajo; que mis pilares que eran mis papás, se habían derrumbado. Pero por el momento me quedé callada. Tenía otras cosas en qué pensar, como contarle a mi mamá, que deje de esperarlo, que él ya encontró a alguien. Se lo dije, y el mundo de mi mamá se volvió negro, sin miedo de oscurecer el mío y el de mi hermana. Ahí conocí a Cuatro , un chico sin nada especial por el momento; que me gustaba. En esa época yo ya esaba perdida.
Era chica, tenía que cuidar a mi hermana 12 horas por día; tuve que aprender a cocinar, a cambiar lamparitas, a prender salamandras, tenía que lograr que mi hermana de 8 años menos siga con una vida normal, aprendí a hacer la mayoría de cosas que sabe hacer un padre y una madre, también a hacer tareas de colegios y firmar notas de mi hermana, hacer que ella cumpla con sus deberes y también cumplir yo con los míos, ya no podía salir con mis amigas a la plaza porque tenía que cuidar a mi hermana, o como para tapar la situación la llevaba conmigo, tuve que dejar de tener miedo de dormir solas cuando mi mamá no volvía; tuve que saber organizarme y siempre estar bien para que el resto esté bien. Por otro lado, mi mamá no era un apoyo; todo lo contrario, te hundía. Mi mamá tenía ataques de pánico, del peor caso, de los cuales me echaba la culpa, y yo tenía que cuidar que esté todo bien en esos momentos; hacerla entrar en razón. Mi mamá me decía que todo yo lo hacía mal, me decía que era lo peor que le pude haber pasado, me decía que si desaparecía se solucionaba todo. Mi mamá me echaba de mi casa, por despertarse de malhumor, y me hacía pasar verguenza con los vecinos; yo no podía dejar a mi hermanita sola y volvía pidiendo perdón por existir. Mi mamá me mostraba cómo no tenía miedo de suicidarse adelante mío, con todo lo que eso implica (gritos, llantos, cuchillos, imágenes que no puedo borrar).. les voy a confesar, que esos días yo tenía terror, no podía dormir, y temblaba; tenía miedo de que le pase algo a mi hermana, o a mi, o a ella (pero en ese momento no me parecía lo peor que a ella). Mi mamá a veces me veía la cara igual a mi papá, y tenía que desquitarse conmigo lo que sentía por él; me hacía doler físicamente y si me defendía era peor.. y si después le llegaba a quedar alguna marca por mi defensa, iba a tener que bancarme basureadas constantes el resto de la 'tranquila' semana. No aguantaba más nada.
Pero ahí encontré como abstraerme de lo que pasaba a mi alrededor, cómo hacer para ignorar los gritos en mi contra, cómo no sufrir en silencio: tenía a
Cuatro, aunque teníamos 15 años, él hacía que no me sienta sola. Yo sentía que él me cuidaba en secreto; era mi protección en persona. Y sin querer, esos pilares que se me derrumbaron en mis papás, volví a construirlos en él. Sentía que no importaba cuánto me podía decepcionar el resto, porque lo tenía a él, que nunca haría nada en mi contra, nunca iba a sentirme mal si estaba con Cuatro; podía confiar en él.
Otro error en mi vida, volverme dependiente; por eso es que volví a sufrir tanto, por eso la decepción casi me consume. Pero esa ya es otra historia. Ah, y después las cosas empeoraron cuando al mes queda embarazada la novia de mi papá. Continuará.

26.9.09

Cómo enamorarla. Pasos sencillos.

Es muy fácil, nada más hay que hacer lo que queremos sin que lo pidamos. Si no hablamos, es porque estamos esperando que llames. Si nos vamos enojadas por tu culpa, seguinos.Si miramos tu boca, besanos. Cuando te empujamos o pegamos, agarranos y no nos dejes ir. Cuando te puteemos, besanos y decinos que nos amas. Cuandoestamos calladas, preguntanos qué nos pasa (bien). Cuando te ignoremos, danos toda tu atención. Cuando nos salgamos del camino, volvenos a encaminar. Cuando estemos desarregladas e impresentables, decinos que estamos lindisimas. Cuando veas que estamos por llorar, abrazanos, no hace falta que digas nada. Cuando nos veas caminando, atrapanos por la espalda y abrazanos. Cuando tengamos miedo, protegenos. Cuando nos apoyemos en tu hombre, besanos. Cuando te demos cariño, dános también y hacenos reir. Cuando estemos confundidas, adeguranos que todo está bien. Cuando te miremos con duda, decinos que no es verdad. Cuando te agarremos las manos, agarrá las nuestras y juga con nuestros dedos. Cuando nos encontremos, pasala bien y sonreí. Cuando te contemos un secreto, guardalo y no se lo cuentes a nadie. Cuando te miremos fijamente a los ojos, no bajes la mirada hasta que nosotras lo hagamos. Cuando te extrañemos, es que nos estamos muriendo por dentro. Cuando digamos que te queremos, es en serio y más de lo que te imaginás. Cuando nos rompas el corazón, el dolor nunca se va ( y acá podría hacer toda una entrada al respecto; no lo hagas). Cuando hablemos por teléfono no cuelgues aunque no estemos diciendo nada. Cuando te digamos que nos parece que la cosa no va más, todavía queremos que seas nuestro.

23.9.09

Lo sospechaba.

Que lo que sentimos está en la cabeza, y no hay vuelta que darle. Se supone que por ser mujer, tendría que pensar que los sentimientos son esas emociones que nos guían y nos hacen elegir y blablá todo así (cosa que pienso la mayoría del tiempo, que existe el amor y todo lo que eso conlleva). Pero hoy me di cuenta que no. Si pensás que no amás, no vas a amar. Si pensás que no es para tanto, no va a ser para tanto. El mundo es frío, y hoy estoy fría; y el mundo es de los fríos, que lo puedan controlar. Y yo eso ya lo sospechaba. Así que me voy a hacer una receta nueva que encontré en una revista vieja; mientras otros conquistan el mundo, besos!.

18.9.09

Y ahora me siento bien.

Por eso que estoy como callada, como que la cosa parece abandonada; pero no.

7.9.09

Película repetida.

Ayer volví a ver la película "The holiday" o "El descanso" traducida; y me dejó pensando:
- ¿Por qué me atrae una persona que sé que no es buena?
- Creo que yo sé la respuesta. Porque esperás estar equivocado, y cada vez que ella comete un error y algo te dice que no es buena no haces caso, y cuando se porta bien contigo y te sorprende, vuelve a conquistarte y descartás la idea de que no te conviene.
- Exacto!

Me entienden esos personajes eh.

6.9.09

Como re loco.

Es tener sentimientos. Porque no se sabe de donde vienen pero se sienten, y cómo. Si te raspás la rodilla, sabés que te duele ahí; que te ponés pervinox, gasita y en unos días ya está; de última vas al médico. Pero cuando te agarra una tristeza profunda, esas que hacen brotar lágrimas hasta enrojecer tu cara; no entiendo dónde me tengo que poner el pervinox, dónde ponerme gasita, ni menos estipular en cuánto tiempo se cura. Es inexplicable, cómo se puede sentir de una parte del cuerpo que no parece física. No hay anestecias ni analgésicos, se dice que para el corazón; pero todos sabemos que el corazón no siente ni felicidad ni tristeza; bombea sangre. En fin, es como re loco posti posti. Con la alegría pasa algo similar, uno sabe que está contento porque siente mucha vida, mucha energía, muchas ganas de hacer muchas cosas que le sugiere esta parte del cuerpo que no entiendo cuál es. El cerebro, digamos; nunca conocí a alguien que por una operación de cerebro deja de tener sentimientos; capaz no siente una pierna, o incluso todo el cuerpo; pero sentimientos abstractos, siempre.

2.9.09

Me alegró. Me contagiaron.


Capaz por tener 18 años, por ser mujer, y por vivir hoy; no es lo común. O capaz que sí y no lo sé. Pero hoy estaba medio bajón, medio que un día para que pase rápido y listo. Hasta que me dijeron que tenía que llevar a mi hermana al dentista, parecía que la cosa venía peor todavía. Voy con ella a la parada del colectivo, preparo las monedas y tuvimos que correr porque se nos iba. Al llegar a la puerta del colectivo, veo que habia muchisima gente bajando y que iba tener que esperar para poder subir; miro a los que bajaban, y eran nenes que gritaban "seño! seño!", a dos pobres "seños" que no daban a basto con los 10 chicos especiales que bajaban felices como nunca del colectivo. Les doy una mano, los ayudo a bajar y me sonríen; largan carcajadas y me miran con una inocencia que es única y una felicidad que es auténtica; contagian. Cuando al fin pude subir, con mi hermana; ya era otra mi actitud. Saludo al colectivero amablemente, pido las monedas y me siento. Había 3 viejitos sentados, se tenían que bajar en la parada siguiente; los ayudé porque no podían, se reían de su lentitud y hasta hacian chistes de que eran ganadores porque yo los ayudaba a bajar; y me desearon un buen día y me dieron las gracias; con otra sonrisa auténtica.
Las sonrisas y alegrías auténticas me pueden, fijensé que no son comunes.