Capaz

es necesario que duela. No sé si había dolido tan sinceramente alguna vez, pero se siente como si nunca se hubiera sentido antes.

No sé si es, pero lo parece.

Cuando ni te imaginás que una cosa te puede afectar o hacer mal; y de repente te encontrás ahi.. sola y con sentimiento de culpa. Con ganas de qe todo fuera diferente, y poder volver a empezar.

Estamos todos locos.

Nadie se muestra como realmente es, nadie dice lo que realmente piensa, nadie se arriesga, nadie entiendo cómo no prejuzgar; todos se esconden y están encerrados en sí. Con tal de no sufrir uno se somete a cosas inexplicablemente irracionales. No cortan relaciones porque no quieren sentirse mal, prolongándolas hasta que se vuelven insostenibles. Y después tratamos de olviodar y nos olvidamos. Nos olvidamos de lo lindo que fue alguna vez, nos olvidamos de eso que nos mantuvo unidos sólo por obviar el duelo.
Qué difícil es estar solo sin sentirse solo, qué difícil es decir que si no estás con alguien no es por elección. Lo fácil es decir que sos un pirata, que estás solo porque te cabe la fiesta, que te gusta estar así porque necesitás disfrutar de tus amistades y que no servís para estar en pareja. Me cansé de escuchar tantas pelotudeces. Me cansé de ver cómo la gente no puede asumir que a veces uno no logra lo que quiere, que uno no siempre alcanza el ideal que se espera para cada uno de nosotros. Por qué nos cuesta tanto asumir que podemos fallar, o que podemos no cuadrar en lo que se espera de nosotros. Que tenemos debilidades, que hay gente a la cual le caemos mal. Que hay cosas que no entendemos, o que no podemos resolver.
Me cansa porque cuando siento que no cumplo con todo eso que se espera para mí, la gente me juzga con un "te la buscaste", "ay, pobre". ¿Pobre qué? Pobre el que no puede ver sus fracasos. Pobre el que no puede equivocarse con la conciencia tranquila, pobre... Pobre el que no ve que atrás de cada vacío, atrás de cada caída, atrás de cada cachetazo, viene un aprendizaje, una moraleja, que no está escrito en ninguna parte, y que los que se apenan de uno no nos lo pueden transmitir. Lástima por la gente que no puede romper con las expectativas de esta sociedad para salir a la vida.

Cosas que valen la penaa!

El nacimiento de un ser esperado. Tener a alguien a quien poder dar los buenos días al despertar. Una sonrisa de una persona querida. Una mirada oportuna. El llanto por un amor cuasinolvidable. Una lágrima que salta al suelo de alegría. Observar el cielo y sus colores, con matices sublimes. Las estrellas, tanto de cerca como de lejos. Salir cuando llueve y buscar el arco iris. Ver como los árboles, tras la lluvia, están empapados de gotas formadas con perfecta matemática. Reír sin saber por qué. Recibir noticias de un antiguo amigo. Despertarse después de una gran fiesta. Una fiesta sorpresa. La primera palabra de un bebé. Tirarse en el pasto, en un día soleado. Bañarse en una pileta con amigos en un día de calor. Sentir la arena de playa en tus pies desnudos. Una foto bien tomada. Una palabra especial. Que alguien te diga que le importás. Las canciones que te recuerdan a "ellos". La música de tu vida. El descubrimiento. Encontrar un tesoro de tu infancia al cabo de los años. Coleccionar recuerdos. Aprender. Escuchar a los que saben. Estar en otro lugar y sentirte como en casa. Salir con tus amigos y pasarlo zarpado enfiestandose. Ver cómo la gente ríe de una gracia oportuna. Compartir. Conocer a alguien y ver que tenés muchas cosas en común. Escribir y ver que a la gente le gusta, o simplemente escribir porque sí. Ayudar a una persona que nunca esperaba tu intervención. Vivir en tu casa, sin que nadie te falte. La mirada de un niño travieso. El brillo de los ojos de una persona que se siente viva. El calor de otra persona que duerme con vos. Soñar despierto. La soledad de la elección. Una sonrisa recién levantada. La música en nuestra mente antes de un examen. Dormir hasta la hora que quieras. Que alguien cocine tu plato favorito. Una caricia. Un abrazo en grupo. Bailar con los ojos cerrados. El ballet. La luna llena. Leer las palabras que necesitabas oír. Encontrar a una persona que te haga sentir viva. El silencio. Ver que la última masita que queda en el platito es la que más te gusta. La esperanza. El recuerdo. La canción que te dedicaron. Un concierto con tus amigos. Intentar emborracharse. Saltar en una cama. Extender los brazos bajo la nieve. El primer beso. Las vacaciones. La ilusión. Ver como tus sueños se realizan. Un cuento. Sentir la lluvia sobre tu cara. Ver una foto después de muchos años y recordar buenos tiempos. La improvisación. El chocolate. La felicitación por un trabajo bien hecho. El reencuentro con tus antiguos compañeros. Enseñar. Una conversación interesante. Un encuentro familiar. La reconciliación con un ser querido. Leer tu libro favorito. Una poesía. El viento acariciando tu pelo. La convivencia. La solidaridad. El abrazo de un padre. Un cuadro que te hace recordar. Conseguir lo que en un sueño tuviste. Sentir el sol. Un beso. El apoyo de un amigo en un mal momento. La inspiración. Sentirte libre. Expresar lo que sientes y encontrar las palabras adecuadas. El tiempo previo antes de iniciar una relación con alguien. Conocer a alguien en un lugar inesperado. El consejo. Volver de un viaje y ver que tienes miles de mails/mensajes. Ganar un premio. Sacarse un diez. Tener una pelea con tus hermanos y despues abrazarse, olvidando qué sucedió. Estar en un escenario. Recibir aplausos. Cantar una canción bajo la ducha. Reír hasta que duela. El alivio de sentir que hiciste algo bien, superando el egoísmo. Ayudar a alguien, sin esperar recibir nada a cambio. Comprarte un vestido sin necesidad, sólo porque estaba en la vidriera y te gustó. Encontrarte con alguien donde nunca hubieras imaginado. Un baño de espuma. Alegrarte por alguien. La felicidad de las personas. Las personas. La vida.

Inmortalidad

Siempre supe (y sé), que hasta el día en que me muera; voy a ser inmortal.

A veces pasa,

que alguien te rompe un sueño, pero hay que soñar de nuevo. A veces la angustia te deja sin respiración, pero hay que mantener la calma. A veces en la oscuridad, te ponés a bailar con un recuerdo feliz. A veces tenés miedo, pero te inventas un abrazo. Pero te aseguro que a mi nunca, me vas a ver mal; total, alguna vez volverá a ser verano, aunque el mar haya huído y sea inalcanzable. Alguna vez volverá a ser de noche y podré descansar del agudo reflejo del sol en las pupilas. Total, alguna vez volverá una piel conocida a acariciarse con la mía; aunque quizás sea en un sueño, aunque sea inventada. Total, nadie podrá decirme que lo que digo es mentira, que lo que pienso es mentira, que lo que espero es mentira, que lo que siento es mentira. Todo es posible cuando llueve. Si das un salto alto las estrellas se te pueden meter en el pelo. Si una estrella se cae en tus manos, la amasas hasta darle tu forma, la pones en la heladera y después te la comés. Pero no sucede seguido. A veces no sucede ni siquiera una sola vez en la vida.
Eso no quiere decir que no esperes que pase…

Esto es todo lo que existe,

nada más. No existe otro lugar, otro momento, ni otro ser; más que el acá, el ahora y nosotros. Ningún sentido tiene pensar en las consecuencias o en la duración.

(des)Drama

Me pasa, que no puedo leer nada de lo que escribo. Me aburre leer lo que escribí en este blog, tanto drama, tanto sentimiento. Yo no voy por la vida así, quiero aclarar; nunca se me va a notar si estoy mal o si siento tristeza. Quiero escribir algo que me guste leer, algo que vaya con mi personalidad, algo que deje de ser para descargar nomás; algo que sirva. Pero ahora sólo me sale quejarme, de lo drámatica que soy cuando escribo en esta cajita blanca. Puaj.

Cambia el color del día.

Que no paren de mirarme dos bebés en el bondi y sonreirnos, salvarle la vida a una lombriz, ayudar a una cieguita a cruzar la calle, mensaje de texto de una amiga diciendo que me quiere, que una anciana me felicite por ser hermosa en el tren (sabiendo que lo hace sin ver con claridad), ganar un buscaminas, que mamá haga bizcochuelo, que mi hermana me mienta para no hacerme sentir mal teniendo 8 años menos que yo, hacer un regalo y que guste (saber que de verdad gustó), darme cuenta que estoy de vacaciones y que tengo muchos planes para los días que vienen. Eso, hizo que cambie el color de mi día; y mirándolo ahora, hasta fue día ideal. Quién lo hubiera imaginado.

Decir no,

es crecer. Parece re cualquiera, pero no te das una idea de lo que creces diciendo NO. Cuesta muchisimo, como cuesta todo crecimiento; pero qué bien hace sentir una vez logrado!. Estoy logrando no volver a caer en el jueguito sin fin, en el circulo vicioso de aparecer y desaparecer de manera directamente proporcional a lo solos que nos podemos llegar a sentir. No voy a negar que pudo haber sido una buena compañía, pero va a venir una mejor. Y si no viene una mejor, no importa; conmigo me alcanzo, soy suficientemente buena para acompañarme.

Es común,

saber que todo vuelve. Pero también es común que hayan excepciones a la regla. La excepción soy yo, y él no vuelve. No sé porqué, pero no vuelve.

La vida da muchas vueltas,

aprendé a RODAR.

Desencantada.

Es verdad, que el primer amor nunca se olvida. Pero en este momento siento, que el primer amor es el único del que te enamorás. No creo que vuelva a sentir por alguien lo que sentí con él; todo fue especial, como se dieron las cosas y lo que pasamos; no se va a repetir ni parecer. Y es eso lo que me pone triste, no volver a sentir eso nunca más. Nunca más super celos, super compañía, entendernos con la mirada, nunca más comer con alguien esas gomitas gorditas durante toda una peli y reirnos por nada. Siento que nunca más voy a amar a alguien, y estar tres años con esa persona, amándola. Ahora creo que el amor es un ratito, y que quizás vaya a tener buenos acompañantes, pero nada más. No creo que algún día vuelva a tener miedo de que un chico/hombre me deje, porque ahora me parece que conmigo misma alcanza y sobra, y que si me dejan no valen la pena. No creo que me vuelva a preocupar por el bien de una persona que no sea ni amigo ni familiar. Nunca más voy a sentir pasión. Ganas en demasía de estar con alguien. Ganas de proyectar cosas, ganas de que dure para siempre. Voy a estar con alguien que me quiera, si; con alquien que la pase bien, y que me haga sentir mejor. Pero no voy a poder amar a esa persona como ya amé. Porque se aprende, y yo juro que no quería aprender, pero aprendí. Y entendí que amar lastima, y por eso (inconcientemente) no me voy a permitir volver a enamorarme. Mientras espero, a esa persona que me quiera; voy a recordar lo bueno del amor; porque sé que con el tiempo me lo voy a olvidar. Voy a recordar, cuando no era fría y me hacía feliz su felicidad. También voy a disfrutar, de mis amigos y familia; que a ellos sí los puedo amar.